7. LA EUFORIA DEL CUERPO. LA SALVAJE CARNE

CAPÍTULO 7

La euforia del cuerpo. La salvaje carne.

    Relata la belleza y fortaleza de los lobos, cada uno único, y compara esto con la forma en que se juzga a las mujeres por su apariencia, asignándolas a un ideal estrecho. Enfatiza la idea del cuerpo como un sensor con múltiples sistemas de comunicación, que en los relatos de hadas se caracteriza por poseer poderes sobrehumanos. Se trata de un individuo multilingüe que habla a través de sí mismo y recuerda en las células. El objetivo de incrementar su valor es obligarlo a vivir sin el espíritu que le corresponde. Las mujeres tienen razones para rechazar modelos que respaldan el espíritu y rompen la conexión con la naturaleza instintiva, que valora el cuerpo y el espíritu por su vitalidad, capacidad de reacción y resistencia, abarcando todas las características de belleza, forma y función.

El habla corporal.

    El documento trata acerca de la aceptación del cuerpo femenino y cómo las normas culturales imponen estereotipos negativos sobre la apariencia de las mujeres. La autora y su amiga, procedentes de diversos ámbitos culturales, aprenden a valorar sus cuerpos al conocer a mujeres de otras culturas que consideraban hermosos rasgos que en su cultura eran vistos como defectos. Se reflexiona acerca de que las mujeres con obesidad tienen un "problema" que debería solucionarse, señalando que juzgar negativamente la apariencia natural de las mujeres genera inseguridad en generaciones conocidas.

El cuerpo en las películas de hadas.

    Los relatos de hadas simbolizan el cuerpo mediante objetos mágicos, como alfombras voladoras, varitas y manzanas curativas, que le brindan poderes especiales de transporte, percepción y curación. Los objetos mágicos que simbolizan el cuerpo adquirido antes de los carruajes y animales de tiro. Los relatos narran los asombrosos poderes sensoriales, de intuición y respaldo que albergan el cuerpo, el cual no debe ser considerado como un objeto simple, sino como una plataforma que eleva y impulsa al espíritu. No obstante, la cultura a menudo ha juzgado y descuidado los cuerpos de las mujeres, lo cual es un ataque a su origen ancestral y les priva de la confianza y el orgullo en su forma natural.

La capacidad de las caderas.

    Relata acerca del cuerpo humano, desde su forma, tamaño, color o edad, enfocándose en su capacidad para sentir, funcionar y reaccionar. Se presentan dos vivencias personales que resaltan el poder y la belleza del cuerpo femenino, sujeto a las limitaciones culturales y sociales. Estas vivencias posibilitan apreciar el cuerpo como un ser autónomo, capaz de transmitir emociones y emociones, y no como un objeto estético o funcional. El escritor resalta la relevancia de establecer una conexión con el cuerpo de forma más profunda, considerándolo un ser que nos ama y depende de nosotros, y que puede ser una fuente de conocimiento y aprendizaje.

La mariposa

    La danza de la Mariposa es una actividad espiritual en la que una mujer anciana y corpulenta, Doncella Mariposa, baila para fortalecer a los insatisfechos y enriquecer las almas de la Tierra. A pesar de que algunos turistas quedan sorprendidos por su apariencia, la Doncella Mariposa representa el alma antiguo, la fuerza fertilizadora femenina y la conexión con el entorno natural. Su corpulento cuerpo y su cabello gris son evidencias de su poder y privilegio de poder tocar a todos, desde niños hasta muertos. Dado que el cuerpo femenino es vulnerable, también es poderoso en su capacidad de percibir, alimentar y dar vida. La cuestión fundamental no radica en la forma o el tamaño, sino en la conexión con la naturaleza y la capacidad de transformar y fertilizar.